EUROPA
Cuna de algunos de los varietales más famosos del mundo, Francia ofrece vinos de máxima calidad, pero también paisajes de ensueño y una atención de primera. Con hoteles y guías para todos los gustos, las cavas de la región de Champagne son el hogar del clásico vino espumante con el mismo nombre.
En Reims se disfruta un aire romántico por las edificaciones góticas y renacentistas que hacen de esta ciudad una de las más bellas de Francia. Por esta zona se encuentra el pueblo de Hautvillers, sede de los mejores sabores del vino Dom Perignon.
Si sigues el camino que va de Alsacia –en Francia– hasta Estrasburgo –Alemania– estarás en la huella de uno de los más famosos y deliciosos recorridos de las rutas del vino. En todo el itinerario te encontrarás con pequeñas aldeas y pueblos perdidos en el tiempo que ofrecen en sus pequeños winstubs –vinerías de clima íntimo y atención cálida– los mejores vinos de cada zona que visites.
Un poco más al sur, en España, están los imperdibles caminos de Castilla-La Mancha llenos de oportunidades para paladear los mejores tintos ibéricos. Entre poblados antiguos y viñedos que incluyen su propio castillo en Villarobledo, este territorio es el que más cultivos de vid tiene en todo el mundo. Su clima extremo pero seco permite pasar unos días agradables sea en la ciudad o en alguna aldea o bodega de los alrededores, ya que cuenta con una buena infraestructura turística y enológica.
Pero la ruta del vino en Europa no está completa si no visitas Portugal, cuna del Oporto. El nombre Oporto fue tomado de la ciudad de Oporto, una de las más bellas del país. Tomando la ruta del Alto Duero te fascinarás con los paisajes de valles y montañas que tienen sus cultivos de vid hace siglos. Los productores de la zona suelen mezclar las cataduras de las uvas, ya que con ello logran una complejidad de colores y sabores irrepetibles. Saboreando algún vino de la región mientras te entretienes con el pasar del río Duero el placer de la degustación está asegurado.